McKamey Manor: el límite del consentimiento y la fascinación por el sufrimiento

En estas fechas de Halloween, como cada año, resurgen en internet los debates sobre las experiencias extremas de terror, como McKamey Manor, y las dudas sobre la motivación de las personas que deciden participar en ellas. Si quieres saber qué motiva a alguien a someterse voluntariamente a situaciones que muchos considerarían tortura psicológica y física ¡sigue leyendo!

Sheila Odena Galceran

10/29/20255 min read

white and black wooden house
white and black wooden house

McKamey Manor: la casa del terror más extrema

McKamey Manor es una atracción de terror extremo ubicada en Tennessee (Estados Unidos). Es mundialmente conocida por su intensidad física y psicológica, y considerada por muchos como una de las experiencias más perturbadoras del entretenimiento contemporáneo (Wootson, 2019).

A diferencia de otras haunted house, para participar en McKamey Manor, además de apuntarse a una larga lista de espera —actualmente de unas 20.000 personas—, los participantes deben superar un proceso de selección que incluye exámenes médicos para asegurar que se encuentran en buenas condiciones físicas y psicológicas. Además, deben demostrar que no tienen antecedentes penales y pasar una entrevista con el fundador. Esta “entrevista” sirve, en realidad, para sonsacar al futuro participante información sobre sus mayores temores que luego será utilizada con el fin de hacer la experiencia totalmente personalizada (es decir, si confiesas tener fobia a las arañas, eso es seguramente algo de lo que encuentres allí dentro). Finalmente, antes de entrar les hacen un test de drogas y les piden firmar un consentimiento legal de más de 40 páginas en el que se especifican todos los daños que pueden sufrir allí dentro (Wilburn, J 2024).

La experiencia completa tiene una duración de 10 horas e incluye retos como simulaciones de ahogamiento, encierros, ingestión de insectos y contacto físico directo (Wootson, 2019). Aunque, durante un tiempo, se ofrecía un premio de 20.000 dólares por completar el recorrido, nadie lo ha logrado hasta ahora, pues todo el mundo dice la palabra de seguridad que les permite salir —si les hacen caso— mucho antes. Esto ha generado controversia sobre los límites éticos del consentimiento y el entretenimiento (The Guardian 2024).

Mientras su creador, Russ Mckamey, defiende la legalidad y voluntariedad de la atracción, sus críticos lo califican como una forma encubierta de tortura (Wootson, 2019).

Entre la experiencia extrema y el trauma

Esta experiencia empieza en casa de la persona participante, donde los trabajadores de la Haunted Hause simulan secuestrarle con una furgoneta y le llevan, con la cabeza tapada, hasta Mcamey Manor. Le pueden arrastrar a la fuerza hasta el interior para dar inicio a la experiencia.

Pese a que operan bajo el principio del consentimiento informado, las experiencias reportadas por algunos participantes, como Laura Hertz, sugieren que las líneas entre la experiencia extrema y el trauma real pueden ser difusas (Renzi, 2023). Esta participante relató que, pese a utilizar la palabra de seguridad en repetidas ocasiones, continuó siendo sometida a torturas físicas y psicológicas. Esto ha planteado la duda sobre la eficacia del consentimiento informado en situaciones donde la manipulación psicológica puede influir en la capacidad del participante para retirarse voluntariamente.

Consentimiento, denuncia y fascinación

Diversas personas participantes han denunciado a Russ Mckamey por las lesiones físicas que refieren haber sufrido durante el recorrido, lo que despierta siempre el debate sobre el peso del consentimiento. El mismo Russ ha comentado en diversas entrevistas que el consentimiento que les pide firmar es una forma de presión psicológica para añadir tensión a la experiencia, puesto que no existe documento legal que brinde el permiso de agredir a alguien pese a su voluntad.

Pese a las múltiples denuncias y una petición con más de 190.000 firmas solicitando el cierre de McKamey Manor, la experiencia sigue operativa. En 2024 McKamey demandó al Fiscal General de Tennessee tras una investigación sobre las prácticas del lugar (Renzi, 2023).

Y aquí llega la pregunta de muchos: Ccon toda esta información ¿por qué la gente sigue queriendo ir?

El atractivo psicológico del horror extremo

Según la teoría de Zuckerman (1994), existen personas con un perfil de personalidad de alto riesgo (sensation seekers) que buscan emociones intensas constantemente. Se conoce que algunas de las personas que han participado en la McKamey Manor eran, por ejemplo, ex militares que decían buscar esa adrenalina que ya ni siquiera saltar en paracaídas les ofrecía a causa de la habituación.

Pese a esto, no podemos generalizar, ya que son muchas las personas que han asistido y las que siguen en lista de espera. A mucha gente —por nuestra necesidad intrínseca de tener una explicación para todo— le gustaría contar con una razón concreta como “tienen traumas de la infancia” o “son personas perturbadas” pero no es posible. Lo cierto es que no conocemos a cada una de las personas participantes para hablar de sus condiciones y motivaciones, pero si conocemos aquellos factores que pueden empujar a la población general a buscar este tipo de experiencias extremas:

  • Adrenalina y respuesta al miedo: Cuando el cuerpo se enfrenta a miedo intenso, ibera adrenalina y cortisol, lo que nos ayuda a permanecer en alerta máxima para huir o defendernos. Esta sensación, dentro de un entorno controlado, nos permite disfrutar una experiencia fuera de lo habitual en nuestro organismo. Para algunas personas, este subidón químico es incluso adictivo, similar al que producen los deportes extremos como el paracaidismo.

  • Prueba de límites personales: Este tipo de experiencias nos ofrece también la oportunidad de ponernos a prueba física y mentalmente, por lo que algunas personas las aprovechan como forma de descubrir hasta dónde son capaces de resistir. Completar (o incluso intentar simplemente) la experiencia, ofrece una sensación de logro igualmente agradable.

  • Curiosidad por lo prohibido o extremo: McKamey Manor tiene mucha fama mediática por ser “la casa de terror más extrema del mundo”. Esto genera curiosidad y activa la atracción por lo prohibido que experimentamos al ver películas gore o vivir otras experiencias límite, lo que no significa que queramos vivir esas experiencias de forma real.

  • Narrativa y story-telling: El hecho de que la experiencia en la McKamey Manor sea personalizada la hace ver como única e irrepetible, lo que ayuda a que las personas quieran vivirla para poder contarla después. Esta historia personal se convierte en un trofeo social o símbolo de valentía.

  • Curiosidad por el miedo ajeno: También hay personas que sienten curiosidad por ver si los rumores son ciertos y comprobar cómo reaccionan los demás al comparar su propia experiencia con los relatos de otros participantes.

  • Prueba social y escasez: Estos son dos fenómenos de los que habla la psicología del consumidor. La larga lista de espera actúa como un multiplicador del "hype" y la atracción por la exclusividad (escasez). Nos puede llevar a pensar que “si es tan difícil de conseguir y tanta gente lo quiere, debe ser valioso” (prueba social).

Conclusión

McKamey Manor es una experiencia de terror extremo que pone a prueba los límites de sus participantes, generando debate sobre la ética y la validez del consentimiento informado. A pesar de las denuncias, atrae a personas de todo tipo, motivadas por la adrenalina, la prueba personal y la curiosidad. Pero ¿sabes cómo son su fundador y las personas que trabajan allí?

Referencias

Renzi, A. (Director). (2023). Monster Inside: America's Most Extreme Haunted House [Documental]. Hulu.

Senanayake, N. (2024). Controversial Haunted House Where Staff Physically Assaults Patrons Is Still Open, Despite Backlash. People. Recuperado de https://people.com/mckamey-manor-still-open-despite-backlash-tennessee-haunted-house-arrest-owner-8724606

Tenn, M.D. (2024). Memorandum opinion, No. 1:24-cv-00037 (M.D. Tenn. Dec. 23, 2024). Justia. https://law.justia.com/cases/federal/district-courts/tennessee/tnmdce/1:2024cv00037/98980/66/

The Guardian (2024). McKamey Manor: Inside America's most extreme haunted house. YouTube. Recuperado de https://www.youtube.com/watch?v=HvCzXSjujkE

Wilburn, J (2024). McKamey Manor Owner Sues State AG, Fire Marshall. (2024). Tennessee Bar Association. Recuperado de https://www.tba.org/?blAction=showEntry&blogEntry=105543&pg=LawBlog

Wootson, C. R. (2019, octubre 30). An ‘extreme’ haunted house requires a 40-page waiver. Critics say it’s a torture chamber. The Washington Post. https://www.washingtonpost.com/nation/2019/10/30/an-extreme-haunted-house-requires-page-waiver-critics-say-its-torture-chamber/

Zuckerman, M. (1994). Sensation seeking: A comparative approach to a human trait. Lawrence Erlbaum Associates.

Sheila Odena Galcerán

Neuropsicóloga Forense (Nº de Colegiada 30681) y Mediadora.